El 17 de mayo se celebra el #DíaMundialdelaHipertensión bajo el lema: “¡Mida su presión arterial con precisión, contrólela, viva más tiempo!”. Su objetivo es concienciar a la población sobre la importancia de la prevención, diagnóstico y tratamiento de la hipertensión arterial, un importante factor de riesgo en enfermedades cardiovasculares.
La presión arterial o tensión es la presión con la que el corazón impulsa la sangre a través de las arterias hacia los órganos y tejidos del cuerpo. La tensión máxima o presión sistólica hace referencia a la contracción de los ventrículos del corazón, mientras que la mínima o presión diastólica, a la relajación de los mismos. Por tanto, la presión arterial puede darnos algunas indicaciones sobre el estado de nuestro corazón.
Cuando los valores de presión se alejan de aquellos definidos como saludables, ya sea por debajo (hipotensión) o por encima (hipertensión) se consideran patológicos.
La hipertensión arterial es una patología caracterizada por unos niveles de presión arterial superiores a 140/90 mmHg de forma mantenida en el tiempo. Es frecuente la ausencia de síntomas, por lo que se complica su detección temprana, y estos solo suelen aparecer a presiones muy altas (superiores a 180/120 mmHg) y consisten en: dolor intenso de cabeza y pecho, mareos, visión borrosa, náuseas, confusión, etc.
La importancia de esta patología radica en que a largo plazo produce una remodelación del corazón y de las arterias, que desencadena enfermedades muy graves y mortales, como pueden ser: insuficiencia coronaria, angina de pecho, arritmias, infarto cerebral, hemorragia cerebral, insuficiencia renal, alteración de la visión, entre otras.
Hay algunos factores de riesgo para la hipertensión que no son modificables como son: tener antecedentes familiares de hipertensión, ser mayor de 65 años o presentar otras enfermedades como diabetes o nefropatía. Sin embargo, hay otros factores que sí son modificables y podemos contribuir en su mejora de forma activa mediante unos hábitos de vida más saludables.
Como dice la Fundación Española del Corazón: “el mejor tratamiento de la hipertensión es una buena prevención que evite su aparición”. Por ello, desde #Macoesa pasamos a describirte algunos hábitos imprescindibles en la prevención de la hipertensión:
Además, una alternativa terapéutica natural muy interesante cuando se empiezan a detectar alteraciones en la presión arterial es el uso de infusiones de olivo. Ya que las hojas de olivo tienen propiedades antihipertensivas (1), que pueden ayudar a prevenir esta patología y están indicadas en casos leves o moderados. En el Laboratorio #Macoesa contamos con Olivo Herbofarma, producto dentro de nuestra gama de plantas medicinales simples y troceadas que se conservan envasadas al vacío en atmósfera inerte, para garantizar una esterilización completa y una mejor conservación de sus propiedades. Se puede utilizar antes de las comidas, añadiendo una cucharadita de las hojas troceadas en una taza e infundiendo durante 10 minutos.
Referencia:
(1)Susalit, E., Agus, N., Effendi, I., Tjandrawinata, R.R., Nofiarny, D., Perrinjaquet-Moccetti, T. y Verbruggen, M. (2011). Olive (Olea europaea) leaf extract effective in patients with stage-1 hypertension: comparison with Captopril. Phytomedicine,18(4), 251-8. doi: 10.1016/j.phymed.2010.08.016.
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